La iniciativa surge como respuesta a la petición del Consiliario de la Cofradía.
El Vía Crucis del Cristo del Silencio tendrá este año como novedad la presencia de la Cruz de los Jóvenes de San Juan Pablo II, junto al icono de la Virgen y el cuadro del Papa.
En el día de ayer, la Cruz fue trasladada en Vía Crucis a la Parroquia de San Mateo procedente de la Iglesia de San Pedro Mártir.La iniciativa parte de la Delegación diocesana de Juventud con el fin de impulsar la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Cracovia este año.
Es conocida como la "Cruz del Año Santo", la "Cruz del Jubileo", la "Cruz de la JMJ", la "Cruz peregrina"; muchos la llaman la "Cruz de los jóvenes", porque ha sido entregada a los jóvenes para que la llevasen por todo el mundo, a todos los lugares y en todo tiempo. En el año jubilar de 1984, Juan Pablo II decidió que tenía que haber una cruz, como símbolo de la auténtica fe cristiana, cerca del altar mayor de la Basílica de San Pedro, donde todos pudiesen verla. Así, fue instalada una gran cruz de madera, de 3,8 metros de altura, como él deseaba. Al final del Año Santo, después de cerrar la Puerta Santa, el Papa entregó esa misma cruz a la juventud del mundo, con estas palabras: "Queridos jóvenes, al clausurar el Año Santo os confío el signo de este Año Jubilar: ¡la Cruz de Cristo! Llevadla por el mundo como signo del amor del Señor Jesús a la humanidad y anunciad a todos que sólo en Cristo muerto y resucitado hay salvación y redención" (Roma, 22 de abril de 1984).
Los jóvenes acogieron el deseo del Santo Padre. Se llevaron la cruz al Centro San Lorenzo, que se convertiría en su morada habitual durante los períodos en los que aquélla no estuviera peregrinando por el mundo. En 2003 Juan Pablo II quiso regalar a los jóvenes una copia del icono de María Salus Populi Romani: "A la delegación que ha venido de Alemania le entrego hoy también el icono de María. De ahora en adelante, juntamente con la Cruz, este icono acompañará las Jornadas Mundiales de la Juventud. Será signo de la presencia materna de María junto a los jóvenes, llamados, como el apóstol san Juan, a acogerla en su vida”.
El próximo Viernes de Dolores, será la Vocalía de Juventud "Jóvenes Enlutados del Silencio" la encargada de portar y custodiar la Cruz de San Juan Pablo II durante el desarrollo de nuestro Vía Crucis el próximo día 18 de marzo.
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